El lifting o levantamiento del brazo (braquioplastia) es un procedimiento quirúrgico que elimina el exceso de grasa del brazo y le da una nueva forma (moldea) a la piel y al músculo. Puede efectuarse para corregir los efectos de la edad, tras pérdidas significativas de peso o después de la cirugía bariátrica. La braquioplastia puede realizarse en conjunto con una liposucción del exceso de grasa. El resultado es un contorno del brazo más firme y delgado.
El lifting con la aplicación de los hilos puede ser considerado como una alternativa a la braquioplastia.
Si usted padece de alguna condición médica como hipertensión arterial, diabetes o problemas cardiovasculares, estos deben ser controlados antes de someterse al procedimiento. Al menos con dos semanas previas a su cirugía, debe dejar de tomar cualquier medicamento que adelgace, así como suplementos naturistas. Recibirá instrucciones en cuanto al ayuno, ingesta de medicamentos, complejos vitamínicos y/o tabaquismo.
Postoperatorio
El cirujano le colocará una prenda elástica de compresión en el brazo, para reducir la inflamación y ayudar a mantener la nueva forma. Se puede colocar un drenaje si hay exceso de líquido. La inflamación por lo general durará entre 2 a 5 días, y desaparecerá por completo durante las siguientes 2 a 3 semanas. Las suturas y el drenaje (si se utilizó) se retirarán en una semana. Deberá ser capaz de regresar a su trabajo y a sus actividades cotidianas en una semana, con la indicación de no levantar objetos, ni realizar actividades intensas hasta que su cirujano se lo indique. La nueva apariencia de sus brazos será apreciada en las primeras semanas posteriores a la cirugía.